lunes, 1 de mayo de 2023

!L´INTENSHÓN ES LO QUE VALE!

 Ni bien habiyamos terminau de soncar nuestros tarros de leche callentita, cuando redepente u´nimponente figura amenazante apareció frente a l´inmensa mesa de nuestro comedor; bien parau y con sus brazos desafiantes colocaus en la gruesa cintura. Luego, luego, de quedarme mudo y´espantau. Me sobé los ojos desesperadamente y rishén pude darme cuenta que se trataba de mi querida y adorada mama de mi mama; sí pues, esa  s´uactitú era inconfundible: -hoy día, d´iaseguro se habiya levantau con tuita la nevada y me encontró terminando de mascar mis últimos bocaus:

-Oíte, Benito, qu´esta seya La última vez que te pido me consigáis una media docenita de ranas, pues vos bien sabís que son p´acerle su remedio pa´ mi compadre Froilán, quien está muy malito y d´iadeveras necesito prepararle su caldito de ranas; porque también ha´siu un güen padre pa´mi; entonce, hoy ya lo sabís y manos a la obra… En este momentito te vais aquicito nomá y me traís ese encargo que es de vida o muerte para mi compadritoy… Porque sinó, podís escoger: te quedáis sin tu americano tuita esta semana o te pongo el lomo más verde que la tablada d´ialfalfa que tenemos aicito, detrás de la casa…

Ya sabía que no tenía alternativa alguna, a pesar que nunca había chapau ranas y no sabiya distinguirlas de los sapos; ya que me habían asegurado que estos animalitos cuando los agarrabas de la panza, se te quedaban pegaus en la mano. Sin embargo, tamién sabiya que dichas amenazas serían cumplidas al pie de la letra y no quedaba otra opción que ir al mismo riyo, pues no estaba tan lejos y además me serviriya pa´ dar una güelta por mis domiños.

Crucé, com´otras tantas veces, el puente de palos del Molino San Juan y me mandé trotey´trote por las chacras de Vivanco. Sabiendo que teniya que chimbar, me quité los viejos caucachos, los colgué en mi cuello y pronto estuve con el pantalón remangau saltando de piedra en piedra con mucho cuidau hasta tratar de llegar a la poza en debajo de la paccha; ande, d´iaseguro, hallariya las dichosas ranitas y me librariya del castigo señalado por mi mamita linda, quien, a pesar de la juerte pose mostrada, sabiya que tuaviya seguiya siendo su wawa preferida…

Al poco rato, después de tacpiar algunos bordos, tuve que quitarme tuita la ropa y quedarme calato, en vista que el pocito pareciba aguallito, pero andaba medio projundo y´el agua clarita me llegaba más arriba de la cintura. Lo primero que vino a mi tuctuca, jue zamparme una huacacha de Padre y Señor miyo, pero espantariya a los negritos y movedizos ocollos, a los bagres y tuito lo que vine a buscar. Redepente, un huaracazo silbó pasando cerquita de mi cuerpo…

-¿Qué pasa… Don Aquilino! Si n´uestoy ni siquiera pisando el bordo de sus maizales…Ni siquiera tengo l´intenshón de sacarme un huiro…Solo he veniu a cumplir con el encargo de mi mama grande…

-Sí, t´estoy catiando dend´iase rato…¿y qué vais a sacar del riyo? No creyó que seya verdá lo que decís…así que mejor te me regresáis por and´eas veniu y…patitas pa´que te quiero…Anque seyas ñeto de la Teresa, quien hace los mejores picantes d´iarequipa, pueee…

-Solo gua chapar algunas ranitas pa´llevarle a mi mama grande; dizques pa´cer un remedio p´al Cuche Quiroz…porque creyó qu´está muy delicau…

-Ahhh… S´ies así… ni güelta que dar…Te dejo tranquilo. Y n´uintentís tirarte los choclos…porque ya te vide la talega que traís escondidita…¿Nooo?

-¡Es pa´guardar las ranitas! Pero si además puedo chapar una huacocha o algún patillo…

-No seyáis zonzo, que eso sol´uay en las cequias…cholito ignorante… Güeno, güeno…Te dejo en paz… pero ya sabís…!Nada de tocar estos choclos, nada!

Metí ambos brazos pa´ tantiar las piedras más grandes, removerlas y ver s´iesque podiya chapar una ranita…Tuve que meter hasta la torocma y… allí encontré una tapa. S´espantaron los asustaus ocollos. Metí una mano y pude tantiar un buen lomo. Eran grande y haciya juerza pa´librarse pero lo contuve y lo metí en la bolsa. Pasariyan como unas tres horas, pues la campana de la Catedral marcaba las dos de la tarde y calculé que tendriya como media docena de ranitas bien desarrolladas… D´iaseguro que habiyan encontrau un güen sitio pa´poder crecer tanto.

Me vestí rapidito y no aguanté las ganas de singar un parcito de huiros negros. Mientras los iba pelando d´iapocos, se sacudiya mi talega y luego, luego, podiya ver que seguiyan vivos. Golví por mis anteriores pasos y así regresé muy contento p´entregar el mayor tesoro encontrau por este trejo chapador de ranas. Busqué en la cocina a mi mama grande y feliz con mi bolsa, m´iacerqué hasta la concha, ande ella estaba preparando sus sabrosos picantes…

-¡Mamitay…aqu´iestán las ranitas que m´ias pediu…Son bien grandecitas…D´iaseguro tu compadre te v´agradecer con tuita s´ualma… Maver…met´uste las mano pa´tantiarlas…

-Maver… veremos s´iesverdá lo que dice este coro... !Jesús, Mariya y José! ¿Quién t´ia dicho a vos qu´esto son ranas? ¡Pasame un palo pa´romperle el lomo a´iste badulaque que nisiquiera puede diferenshar a una rana d´iun sapo! ¡Chapalo, que le gua romper el lomo p´aque aprienda!

AREQUIPEÑISMOS: basado en el Diccionario de Arequipeñismos de Juan Gmo. Carpio Muñoz:

Aguallito: de poca profundidad

Americano: variedad de guisos en un solo plato

Catiar: aguaytar, atisbar

Concha: cocina rústica hecha con adobes y barro

Caucachos: zapatos ordinarios y viejos

Coro: menor, infante; niño

Chimbar: cruzar un arroyo descalzo

Golví: por volví

Huacacha: lanzarse al agua; clavado

Maver: por a ver

Nevada: estado de ánimo muy desagradable en los días nublados

Ocollos: renacuajos; larva de un anfibio

Soncar: beber, tomar un líquido

Paccha: pequeña caída de agua o catarata

Picantes: comidas que se comen con ají o son hechas con él.

Soncar: beber, tomar un líquido

Tablada: chacra o conjunto de ellas sembradas de lo mismo

Tapa: nido o refugio de un sinnúmero de crías

Torocma: cabeza.

Tuctuca: pensamiento

No hay comentarios.:

Publicar un comentario