sábado, 15 de agosto de 2020

AREQUEPAY

 

 

Esas blancas torres centinelas de tu catedral que parecen volar al cielo,

 cual dos fieles orantes palomas, elevan gigantescas preces de sillar.

  Donde hoy, magna fecha, quiero volver a repicar sus campanas revoltosas

 en fervorosa algarabía; y volver a convocar desde el vocinglero tuturuto,

hasta tomar dulcemente los viejos latidos de su joven guardia;

y tocar a rebato revoluciones nuevas, y despertar mozos rugientes cojan su fusil,

con bayoneta en mano, graben el fuego místico en los que nos suceden.

 

Para luego, chiparnos a este homenaje; cantar una pampeña: ¡Apucllay!

Y meternos a la fiesta, reventar las troyas y los cuetes; beber ponche, diana y resacau;

no sin antes, coger mi poncho multicolor y a cuadritos como mis ubérrimas chacras;

pa´ colocarme ese queriu sombrero chuacali y así completo m´iestampa:

de cholololo chacarero, de pujante characato; de picante rocoto;

metiu en mis calzones remangados, pa´chimbar esa lloclla

y no joder mis nuevitos caucachos.

 

Y así, mi Chola Generosa, m´iavengo dende Chapi, pa´ darte un pajtuy d´iabrazos;

dende el güenos diyas, mi reina; ajustáte las polleras, pue hoy te catato,

pa´ cantar el himno a tus glorias y reverdecer tus viejos laureles

porque en e´lalma traigo ondeando el color carmesí del pendón

y clavau en el medio del pecho, un batán que marca vida y enarbola sueños,

con puro olor a texao floreando “gallinitas” de ensueño;

y metida en cada brazo, acolpacho la firmeza d´iun lloque d´iacero,

   del chiwanco madrugador, ese don que sabe cuándo nos besa la lluvia.

porque soy bravo toro de peleya, cruzau con dulce trino de cabiznegro jilguero.

Que tan pronto se shente el Dean, Melgar, Guillén o Atahualpa Rodríguez;

como el campión del Cacique Olmedo; Paulet, Vinateya Reynoso o Núñez Ureta,

Uel Torito Muñoz, Los Dávalos; el Tríyo Yanahuara o el dúo Poce-Cañahuire;

Y que rinde pleitesía a Ma. Nieves y Bustamante, Mostajo, Polar y J.L Bustamante.

 

Pero, por encima de tuitos, al incansable peyón, al gañán, al pellador montonero;

al aijón, al apero, a la yunta; a la chicha de güiñapo y al chimbango;

d´esta Tierra Santa: a su juerte sillar, al humilde adobe y la noble champa.

A nuestros jijunas volcanes de cotimbiantes rebuznos;

a nuestro inmenso cielo azul con bendito sol radiante en tuito e´laño.

Y´al empuje, al valor, al cariño brindau… a todo dar

 por nuestra Mamita de Chapi… ¡Así seya!

Por shempre, ¡Carajo!

 

                                                                                                         Arequipa, Agosto del 2020.

                                                                                                                               JBP.

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