Todos nosotros, los escogidos por
T.L. (Tata Lindo, la última vez que te aclaro), estamos convencidos que su
omnipotencia siempre la ha tocado en Do Mayor y que, por lo tanto, es infalible
en todo cuanto hace, ordena y ejecuta, a pesar de haber transcurrido miles de
billones de años luz, desde el inicio de los tiempos y que, los 2020 añales de
hoy, son una bicoca de tiempo para nuestro Todopoderoso Barbitas; sin embargo,
Ma. Stma. precavida al extremo y con un mes de anticipación, le hizo recordar
que su venerado hijo -El Chucho bienamado- cumplía años ese 25 de diciembre
próximo. Pero el Más-Más, ocupado en hacer llover en Australia y parar la mano
en las Europas, se olvidó olímpicamente del santoyo; razón tan jodida y
chistosa para don Sata, que le causó un ataque risa a boca de jarro, y que por
poco se tira las colas de sus endiabladas inquilinas, a la vez que miraba de
reojo hacia arriba y se volvía a mear de la risa porque era la primera vez que
algo tan trascendente se le escapaba entre las piernas al Tata de Tatas; más lo
peor para el borrachoso Luzbel era la pérdida del gigantesco tono a mandarse entre
las nubes, con full vino de misa y la gran animación del grupo Los Querubines
de Malambo; pues, desde ya contaba con que dicho festejo contaría con las potabilísimas
serafinas y duraría hasta la bajada de reyes.
Bueno, lo cierto es que apenas
amaneció el 26 de diciembre, a las 5
a.m. o´clock, la fervorosa Madre, quien estaba más asada que Ma. de Magdala,
después de la pasada que le hizo el pendenciero de Judas Iscariote, se
empinchó, se amarró su túnica entera en el cuello, subió al Olimpo y le pegó
tal llamada de atención al venerable que lo conmovió al máximo, lo dejó con una
maldita tembladera y lo hizo llorar a mares. Ante tales inundaciones San Piter,
inundado hasta las bolas, quiso consolarlo al Más Más de los cielos, de la
tierra y de todos los rincones del universo, pero no pudo conseguirlo.
No pasaría ni media hora, las
nubes se cargaron al tope, estaban tan negras y pesadas que los chiwankos
empezaron a cantar lastimeramente porque sus avanzados equipos incorporados en
su ADN comenzaron a lanzar su SOS a pleno pico y todo el mundo de la 3ra. y 4ta.
edades ya sabían que se nos venía un diluvio de la G.P. Sin embargo, aquí
abajo, en ese mismo día por la mañanita, como todos los avisos publicados, los capos
ingenieros del SUNAMHI tiraron números y después de leer los anemómetros y
pluviómetros de la última generación (del S XIX), a-se-ve-ra-ron que este
bendito día no caería ni una sola gota de agua en este valle de lágrimas.
-¿Qué va a llover mañana?
¡Naranjas! Es imposible… nuestros records estadísticos, los controles
periódicos efectuados y la efectividad mostrada por nuestra reciente tecnología
nos permiten asegurar que las lluvias se han retirado hasta el próximo verano…
Así que usted puede salir a pasear en bikini.
¡Diluvio Universal! Se ha
declarado Duelo Nacional… Así a aparecían los titulares matutinos del día
siguiente.
-¿Pero, acaso la autoridad
no nos aseguró que las lluvias se fueron de vacaciones hasta el próximo año?
-Bueno, nosotros los técnicos
especializados en Japón, China y la Tía Pocha, solo leemos lo que dicen los
aparatos de medición y control… solo queee… A pesar de ser nuevos, de pronto,
se detuvieron de un momento a otro y… solo quedaba nuestra vasta experiencia
que, al respecto, nos aconsejó…
-OK. Suponiendo que es
cierto, ¿no disponen de otros equipos alternativos que evite los embarres, las
inundaciones, los ahogamientos y todas las mentadas de madre que les ha llovido
por semejante metida de pata todas estas semanas?
-¡Por supuesto, tenemos los
antiguos equipos que están arrumados en el sótano… un poquito oxidados… Con
decir que ya se hacen polvo al tocarlos… Pero con un poquito de aceite y mucha
voluntad, podremos hacerlos funcionar y tenerlos operativos para… dentro de…
calculo yo… más o menos tres años; pero algo es algo ¿nooo?…
-Bueno, señores ingenieros
técnicos, la población necesita de información, sino se van a seguir remojando
en los conos; pues a sus niños ya les está creciendo agallas detrás de las
orejas y las abuelitas se les está uniendo los dedos mismas ranas del Titicaca;
pero con ustedes no es la cosa… y se las pasan de sapos… ¡Tienen que dar
solución inmediata al asunto porque a la población entera les está saliendo
escamas y ya hay un olorcito a pescado… pero podrido; luego…
-¡Es que no podemos hacer otra
cosa!
-¡Recurramos a las maneras
tradicionales, que además son infalibles!
-¿Y cuál es el secreto?
-¡No existe tal secreto!
Tan solo se trata de contratar chiwankos…
-¿Y cómo los vamos a
conseguir?
-¡He ahí el problem!
Previamente hay que conseguir buenos ornitólogos!
-What chu chey?
- Especialistas locales en
pájaros… porque los aficionados extranjeros pueden confundir los chiwankos con
los chirotes y podemos sufrir otra inundación de voluntarios aficionados al
pájaro.
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