martes, 6 de agosto de 2019

LAS IRAS (I)



Estimados amigos, con mis anteladas disculpas, les pido sepan comprender algunas fallas en la redacción de este blogg, pero resulta que estoy hecho un perro y no un perro cualquiera, sino un chajualla* exprimido; o sea, uno de aquellos cánidos chuscos o corrientes que deambulan solitarios, errantes y sin otro congénere que les regale un mísero ladrido a su paso; todo por ser un pobre paria arrojado al miserable y triste abandono; con el agravante que además estoy soportando, por quince largos días con sus noches interminables, una antipática que me llega hasta el cubo; es decir, la muy estúpida es la suma de una influenza tan copiosa, que cada que hago ¡atchíssss!, suelto una piscina de mocos; acompañada por una tos ferina elevada a la máxima pujadera; que incluye una neumonía galopante, que, como nunca, se ha desbocado y me tiene como un trapo “chumado”*, con la narizota de reno, roja de indignación debido a la intocable escaldadura que me ha invadido toda la rocota, hasta quemarme los cornetes de tanto ´sonarme´ ambos chorros.
Pero, además, cada que estornudo, pareciera que los sesos se quieren escapar en doble surtidor y el dolor de cabeza lo siento coronar en el Cóxis; o sea, que estoy hasta mi poto; asimismo, de tanto toser falta poco para que se escapen las dos bolas rojas de billar que tengo por ojos y me dan una apariencia de pastrulo en jodas, sin retorno. El puerco (cuerpo) semeja pesar más de 200 kilos y solo lo puedo arrastrarlo muy lenta y pesadamente, hasta parece que hago surcos por donde voy. Actualmente, debo estar con 45° de fiebre, porque acabo de tomar la mantequillera full y al toque se ha chorreado todita, empapando toda la manta que llevo encima, así como mi doble pantalón de lana; finalmente, paralizado y casi inerte, he intentado ponerme en pie y pareciera que me estoy deslizando sobre una pista de sebo, pues las calcetas y los zapatos -full mantequilla derretida- se han convertido en largos e incontrolables skíes.
Mas lo peor viene por cuenta y riesgo del maldito resfrío, pues he querido llamar a la Inseguridad Social y la cita me la darían (si es que logro un cupo), para el 24 de diciembre del 2025 (que tampoco trabajan); por lo mismo, ayer he tenido que madrugar a las cinco de la maña para obtener la bendita atención, y efectuar resignadamente una colita de tres cuadras. Mas, justo cuando llegué al módulo de atención, me vino un ataque incontenible de tos; causándome una afonía absoluta: no pude hacer mi pedido y solo fui citado para el día siguiente y caí de bruces en las faldas de una enfermera; la misma que, viendo mi estado calamitoso, me arrastró por 20 pasadizos hasta la Unidad de Emergencia, allí tenía que hacer otra cola de dos km. y solo era para pacientes con IRA. Cuando llegué nuevamente al mostrador ya estaba groggi, pues en el camino perdí no solo el conocimiento, sino, mi DNI, mis lentes y mi billetera. Al rato, me depositaron en una camilla y me quedé en total frustración y abandono.
Me han recetado una serie de 24 inyecciones, siendo seis los arponazos, cada tres horas; pero a cambio, estoy millonario en penicilinas y más blanco que un papel higiénico sin uso. Menos mal que por la noche, se me espantó la prostatitis o dificultad para evacuar la orina gota a gota; porque ahora me he transformado en una regadera ambulante, que, cuando estornudo o toso empieza a funcionar la desgraciada a litro por segundo y pobre de aquel que se halle a mi lado, lo riego de pies a cabeza. Estoy pensando seriamente en dejar la manguera y convertirme en un aspersor; ya que me han indicado que debo completar tres series más de cuarenta y ocho inyecciones intramusculares; de solo pensarlo, hasta el sudor se me sale en pequeñas piletitas.  
De no encontrar mejoría para mi cuasi pulmonía fulminante que me tiene como moco de pavo con las 12 recetas recibidas por otros tantos otorrinos, neumólogos y demás especialistas en Medicina Interna consultados, tendré que recurrir a la Medicina no Convencional o Medicina Alternativa, conocida como la Medicina Bioenergética; caso contrario, solo me quedará volver a los remedios caseros de antaño, de los cuales hay uno que es extremo, pero altamente efectivo. Consiste en meterse un baño en una tina full hielo; con su aplicación tienes dos alternativas: a) corte inmediato de la fiebre, de la gripe y de la tos, aunque quedas tan tieso como un pollo congelado; y b) ingresas ipso pucho al campo de la neumonía fulminante sin pasaje de retorno si es que no aguanta positivamente tu puerco. Creo que vale la pena intentarlo, aunque de solo pensarlo ya estoy como un chupete de hielo y sin querer, hasta mi figura ha quedado congelada y las dolidas muelas del juicio, no quieren dejar de zapatear un feroz chancapapas*.
DICCIONARIO LONCO:
*Chajualla = perro común que no tiene pedigree.
*Chancapapas= voz onomatópica que semeja el baile del festivo huayño (metáfora).
*Chumado= exprimido.
 Nota.- Arequipeñismos basados en el Diccionario Lonco de Juan Gmo. Carpio Muñoz

No hay comentarios.:

Publicar un comentario