LA VERDAD DE LA MILANESA

Del Evangelio según San Peter XXII, 22.

1. “Seis días antes de la Pascua Jesu regresó a Bethanya, donde Lázaro había estirado las patas pero Él se apiadó del futuro cuñado y lo resucitó. (Sic.) 2. Conmemorando la 8va. sus hermanas Martha y Miryam querían preparar un delicioso chivo al palo pero aquel escogido se confundió entre las densas emanaciones de los apóstoles. 3. Peor aún, Lázaro, a pesar de haberse remojado por tres días seguidos en una sopa de cal viva y enjuagado en 80 aguas de sándalo permanecía con un inaguantable olor a charqui ahumado y aquel ambiente emanaba como un vetusto depósito con 20 cadáveres en plena putrefacción. Jesu y los demás invitados tuvieron que cubrirse con las viejas túnicas que les servía además de pañuelo, mantel y colchón. 4. Miryam, esperando contar a su lado con el adorable Gran Maestro lo llamó a un rinconcito y derramó ungüentos y perfumes de puro nardo, para disimular la cosa. 5. Judas Iscariote viendo que ella le enjuagaba los pies con sus cabellos, exclamó:

-Conteneos, inocente Mary! ¡Cómo es posible que gastéis pólvora en ese palomo! No veis que dichas fragancias las habéis podido vender por trescientos denarios? ¡Qué falta de confianza… ¿Para qué están vuestros amigos? Es más, yo os podía conseguir hasta el doble de esa cantidad!

-¿Qué os sucede mi querido apóstol Judas Iscariote? ¡Dejadla que me prepare para cuando llegue mi sepultura… que ya falta muy poco! ¿Acaso vuestros celos carcomen vuestra alma y aquellas vuestras inocultables dotes de malhechor quieren robarme lo más hermoso, puro y única que suele entender a cabalidad mis bolas y mis parábolas; no como ustedes, sarta de borricos a quienes tengo que estar repitiendo una y cien veces cada discurso para que puedan coger algo  del mensaje?

-Sorry, Jesu. Sí, ya sé que solo miras por los ojos de ella… Pero vos… acaso no veis la entrega que depara cada uno de vuestros amantes discípulos… yo, por ejemplo, ¿no os has dado cuenta…

-Para, para! Y no Judas! Ya sé dónde queréis aterrizar, so pájaro de alto vuelo… que me las sé toditas y… nunca por nunca te…

-Bueno, bueno; aunque aquello está mal; sin embargo, podéis responderme si ya todo está listo para la última cena, Jesús?

-¿Cómo que última?

-¿Dije última?  Quise decir…Deliciosa Cena!

-Sigues andando muy raro, Judas… La semana pasada has estado consiguiendo mancebos por 50 denarios y anoche, según Peter, te has estado vendiendo al peor grupo de soldados por treinta monedas y, es más, hasta has ofrecido a tus compañeros apóstoles por una bicoca; pero el peor atrevimiento es que vos ya me pusiste precio. Os aseguro que ni de pensamiento voy a cambiar de equipo, antes prefiero la muerte, aunque me crucifiquen y así se cumplan las escrituras y la voluntad de mi Padre que dice: “Este es mi hijo muy amado a quien tengo mis complacencias, pero es muy hombrecito, macho y muy macho, si no preguntad cómo levanta a las hermanas de Lázaro, amén!