JULIO EN FEBRERO

El calentamiento global no solo está afectando las condiciones de temperatura, producción y medios; el mismo está influyendo en la variación conceptual de meses y estaciones -dadas las condiciones nada virtuales que nos están haciendo puré de sesos mezclado con un batido de apariciones demagógicas que ya lindan en alucinaciones- temiendo un descalabro inminente de nuestro firme aguante herido mortalmente por los últimos acontecimientos políticos que cayeron sobre esta sufrida grey choliforniana. Sin lugar a dudas que la aparición sobre la arena del pobre espectáculo circense, cual máximo exponente del divertimento improvisado, la arrastrada jocosidad; así como la precariedad de los payasos y el jolgorio grabado; en general,  son propios del mes de julio por estas latitudes; pero si nos atenemos al calendario recién estamos en febrero loco. Sí, really crazy, mad and stupid, porque la huachafería sumada al desenfado nuestro, ineludiblemente volvemos a navegar en el mar del ridículo, con el agravante que no hay remo, ni navegante, menos bote; pues de la noche a la mañana, apenas sonó el clarín de partida dado por la ONPE surgieron agrupaciones o movimientos disfrazados de partidos y una vez más despertaron la vetusta viveza criolla envuelta en papel celofán, en longos pergaminos o simplemente en improvisadas listas hechas en papel higiénico.

Pues, para esta versión electorera, parece que los rezos han propiciado otro milagro del Negro de la Escoba, San Martincito, pues no solo se ha dado el lujo de revivir dinosaurios camino a la extinción o resurgir aquellos moribundos otorongos que cojos, mudos y ciegos,  aún se sienten sedientos de mil mamaderas. Ahora, estamos viendo, ante el viejo hemiciclo, cómo retozan anhelantes y voluminosos ejemplares hembras: serpientes sibilinas que quieren encantar con estribillos trasnochados; incansables hienas que se ríen, llorando a media caña, porque ya saben sus limitaciones; viejas cacatúas que se desgañitan repitiendo los mismos slogans jurando fidelidad al bolsillo y prometiendo ser su last chance; figuretis improvisados que buscan seguir haciendo teatro pornográfico; desesperados deportistas acabados, hasta cientos de prostis en pos de reivindicaciones sociales, políticas y económicas. De otro lado, los machitos de la 4ta. edad persiguen otros períodos de nulidad, de ocio y transfuguismo, sabiendo por enésima vez que solo hace falta fingir ante los medios (sus ayayeros), así como despotricar contra los supuestos enemigos de la ley, el orden y la fe para seguir convenciendo al populorum de su marcada transparencia, honestidad y responsabilidad en su curul.

Mas la cosa no queda allí. Esta arena política se ha transformado en un gigante tiovivo (obra de la permanente simbiosis entre cucarachas, zánganos y polillas).

-Why, my dear engineer?

-Producto del acomodo, de la sinvergüencería… de la concha de…

-Pare, pare, ingeniero; que hay ropa extendida!

-No. Hago un símil o mejor una metáfora… es el producto natural de la transformación de su piel paquidérmica en una caparazón más gruesa que las existentes en las Galápagos!

-Ah, ya! ¿Y por qué lo del tiovivo?

-Por la edad y por la pendej… digo, su viveza inveterada! Donde no existe las tres filas de caballitos que suben y bajan pausada y animadamente envueltos en una música dulce e infantil para el disfrute de la circular cabalgata; allí, por lo contrario, se puede apreciar: gigantes lagartos, cocodrilos y caymanes hambrientos; feroces lobos, zorros y pumas amenazantes; asesinas orcas, ballenas y tiburones insatisfechos. Todos enseñando las fauces y prestos a devorarse los unos a los otros.

-Bueno… pero el pueblo ya se ha dado cuenta de ello. ¿O no?

-Hasta la pregunta… las masas siguen siendo las mismas… es decir, solo masas!

-No puede ser! Cómo, si ha disminuido la pobreza, no hay analfabetismo; están mejorando los índices de comprensión lectora y la alimentación es de primera… No puede ser!

-Sí, pues, ha disminuido la pobreza… en el norte de Europa; el analfabetismo no solo es el no saber leer ni escribir; es no entender, no criticar, no reclamar! El comprender es no volver a caer en los mismos errores y por último, sí, hay más alimentación… la comida chatarra; porque nutrición solo la tiene la gente que lee y entiende… que entiende el compromiso de ser mejores cada día porque existe el deber generacional para obtener una vida más humana, social y solidaria que garantice una verdadera calidad de vida… por eso yo me retiro!

-¿Cómo, también se nos corre, jefe?

-Naranjas! Y las de Huando. Solo me tomo un break… porque me voy por los yunaites para coversar con la Condy y saber cómo lo hace… también por Alemania y Holanda para averiguar sobre la organización del julbo… de paso me doy una vueltecita por Roma y Grecia para beber de fuentes primigenias y si me alcanza el tiempo, iré al Medio Oriente a ver si me orientan mejor y, finalizando, darme un paseo por el África y traerme algunos refuerzos para el Melgarcito. Aunque pensándolo mejor me regreso por Ámsterdam para disfrutar de sus escaparates y pedir un poco más de información de boca a boca. Tan solo por el hecho de poder ofrecer una real comunicación in situ.

Les aseguro que los primeros días de marzo seguimos en este propósito de sacarles a la fuerza aunque seya una sonrisa. Au revoir, mes amis!